"Soy la novia de Rucci- grité. Entre risas recibieron mi comentario. El plenario de la CGT estallaba, y yo quería herdar su mandato divino.
Dios nos habla a través de la pija y yo fui ungida por la divina pija- Gritaba mientras era arrastrada fuera del recinto."
Ese fue el final de mi intervención sindical, lo recuerdo como si fuese ayer. Quizás fue ayer, los psicotrópicos me alteran un poco. De mi relación con José Ignacio recuerdo muchas cosas: el lujo, la ostentación, la violencia. Era una ingenua jóven cuando lo conocí, casi virgen... ese Torino.
Soy la novia de Rucci, suelo gritar, cuando en los supermercados debo hacer largas filas. La gente me cede el paso.
De niña soñaba con princesas, con ser tratada bien, con Caballeros, misteriosa materia el deseo, nunca amaré como amé a Jose Ignacio. Su muerte no hizo mas que realzarlo a la categoría de mito, eran cientos de miles de falos atravesandolo. Cuando hacíamos el amor me pedía besos negros y luego me amenzaba de muerte si osaba contarlo, aun hoy temo.
Tu figura es un ejemplo para la Juventú de hoy día. A veces veo el mundo en el que vivimos y que feliz te haría vivir en él, no tengo dudas de que estariamos juntos.
Soñaba con Caballeros con armaduras plateadas, corceles y castillos; también fui Hippie. Misteriosa materia el deseo.
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2 comentarios:
cuando eras hippie con que soñabas?
con hombres de pelo largo y binchas?
un abrazo! te sigo
te aviso que si tengo 14 años y esa historia es la mia.No la invente...
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